Las cifras de bebés que fallecen mientras duermen es más alta de lo que todos quisiéramos, es por este motivo que consideramos que es realmente importante que conozcas los principios de seguridad para acostar a un bebé, de forma que puedas reducir drásticamente la probabilidad de que se presente el síndrome de muerte súbita de lactante (SMSL) o la muerte accidental por asfixia.
De esta forma, con el objetivo principal de reducir el riesgo de muerte del bebé o de que este se encuentre en peligro, queremos darte algunas recomendaciones. Además de que debes de saber que también hay algunos productos como las barandillas para camas que pueden ayudar a evitar que el bebé caiga o se haga daño mientras está durmiendo.
Recomendaciones para acostar a un bebé de forma segura
Ahora nos vamos a encargar de destacar algunos de los consejos más importantes que debes de tener en cuenta con respecto a este tema:
- Hasta que tengan 1 año, los bebés tienen que dormir sobre su espalda (boca arriba) a cualquier ahora en que duerman. Está claro que los bebés que duermen boca arriba tienen muchas menos probabilidades de morir por SMSL, en comparación con los bebés que duermen en sus costados o boca abajo. Cuando duermen de costado se puede voltear con mayor facilidad su estómago. Algunas personas piensan que los bebés se pueden ahogar boca arriba, pero la anatomía de las vías respiratorias y su reflejo nauseoso se encarga de evitar que esto suceda.
- Los recién nacidos se tiene que colocar de forma que reciban contacto con la piel de la mamá lo antes posible después del parto, a menos durante su primera hora. Luego de esto, cuando la madre tenga que dormir o no pueda prestar atención piel con pie, los bebés tienen que ser colocados boca arriba sobre un moisés. En algunos casos los bebés prematuros pueden necesitar colocarse boca abajo temporalmente mientras están en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) por problemas respiratorios.
- Hay bebés que se voltean sobre sus estómagos. Pero el bebé siempre tiene que ser colocado boca arriba para dormir, en caso de que el bebé se volteé cómodamente sobre ambas posiciones (de boca abajo a boca arriba y viceversa), entonces no tienes que ponerlo boca arriba. Pero si tienes que asegurarte de no tener almohadas, mantas, protectores o peluches cerca de la cuna, ya que estos objetos pueden terminar ocasionando un bloqueo en el flujo de aire.
- Solo acuesta al bebé en tu cama para calmarlo o alimentarlo. Tienes que poner al bebé boca arriba en su propio espacio para dormir cuando ya esté listo para hacerlo. Si crees que hay alguna posibilidad de que te puedas quedar dormido, entonces tienes que asegurarte de que no haya ninguna almohada, manta, sábana o cualquier otro objetivo que le pueda cubrir la cara o el cuello del bebé.
- No es recomendable compartir la cama con el bebé. Es muy importante siempre tener en cuenta que hay ciertas situaciones que pueden hacer que compartir la cama con el bebé sea algo muy peligroso. Jamás debes de compartir cama con él sí:
- El bebé tiene menos de 4 meses
- El bebé nació prematuro o con poco peso
- Si eres una persona que fuma
- Si la madre del bebé fumo durante le embarazo
- Si bebió alguna bebida alcohólica
- Si no eres uno de los padres del bebé,
- Si la superficie es blanda, como una cama de agua o un sofá muy viejo
Estos son algunos de los principios de seguridad para acostar a un bebé que creemos que debes de tener en cuenta en todo momento para evitar mayores complicaciones.